Una puerta a nuevos mundos

Decía Ouisa Kittredge, magistralmente interpretada por Stockard Channing, en 'Seis grados de separación' (Schepisi, 1993):
- Cada nueva persona que conocemos es una puerta que se abre a nuevos mundos.
No sé si la Sra. Channing imaginaba la verdadera magnitud de su afirmación al pronunciar estas palabras. Yo estoy convencido de ello. Y esto sucede cuando conozco a determinadas personas.

Cada persona que conocemos, me decía Luis, es una nueva rama que crece en el árbol que es nuestra vida. Nunca sabes qué te va a deparar, si será la más bella, la que más sombra dé, o la que haga temblar el árbol. Eso nunca se sabe. Pero en ocasiones, no puedo evitar sentirme alegre cuando conozco a una nueva persona, sobre todo si por ella merece la pena hacer cosas; alguien a quien da gusto oír hablar, porque cuando lo hace es para decir algo que tiene que ver con ser bueno y honesto. Porque posee sueños y porque sabes que los acabará alcanzando.

No somos más que un collage de otras personas. Y a veces, cuando conozco a alguien y me alegro de haberlo hecho, quiero que ese alguien forme parte de mi collage.

RM.

Comentarios

Kairos ha dicho que…
Comulgo completamente con lo que dices.

Siempre me he sentido afortunado, no por lo que tengo, sino por haber conseguido rodearme de determinadas personas.

Necesito junto a mí a gente que me estimule, ya sea de un modo intelectual, físico o afectivo... nunca me he visto como un anacoreta.

Por cierto, te considero una de ramas más importantes de mi árbol. Cualquier día de estos dedico una entrada en mi blog a hablar sobre ti ;-).

Entradas populares